Preparación
1hr 40mins
Tiempo Total
2hr
Rinde
6 Porciones
Pon la carne de cerdo, 2 dientes de ajo enteros y 1/2 cebolla en una cacerola de 4 cuartos. Cubre con 2 tazas de agua y espolvorea 1/2 cucharadita de sal. Calienta el agua hasta que suelte el primer hervor. Tapa la cacerola, reduce el fuego y cocina los ingredientes durante 1 hora o hasta que estén tiernos. Mientras tanto, haz un corte en uno de los lados de cada chile, desde el tallo hasta la punta. No les quites los tallos. Colócalos en una cacerola grande. Agrega la cantidad suficiente de agua para cubrirlos y calienta el agua hasta que suelte el primer hervor. Reduce el fuego y deja que hierva. Tapa la cacerola y cocina los chiles entre 5 y 8 minutos o hasta que estén levemente tiernos. Escúrrelos y déjalos enfriar. Coloca las nueces en una cacerola de 1 1/2 cuartos y cúbrelas con suficiente agua. Calienta el agua a punto de ebullición. Cocina las nueces entre 5 y 8 minutos o hasta que se les desprenda la piel, y escúrrelas. Con un cepillo de cerdas duras o la uña del dedo pulgar, quítales toda la piel que puedas.* Enjuaga la cacerola. Agrega las nueces peladas y la leche, y calienta hasta que suelte el primer hervor. Retira la cacerola del fuego, ponle la tapa y deja reposar 30 minutos. Vierte la leche y las nueces en el recipiente de la licuadora. Añade el queso, la Crema Daisy, el azúcar y el jerez. Tapa la licuadora y licúa los ingredientes a velocidad alta durante 2 minutos o hasta obtener una mezcla homogénea y espesa. Coloca la mezcla en un recipiente mediano, tápala y llévala al refrigerador hasta el momento de servir. Pon el cerdo cocido en una tabla para cortar. Cuela el líquido y reserva 1/2 taza. Al resto tíralo junto con los ingredientes sólidos. Pica bien el cerdo. Calienta el aceite a fuego medio en la misma cacerola de 4 cuartos. Pica la 1/2 cebolla y los 2 dientes de ajo restantes. Pon estos ingredientes en la cacerola y cocínalos, revolviéndolos con frecuencia, durante 8 minutos o hasta que estén tiernos. Agrega los tomates y el perejil. Cocina la salsa durante 5 minutos o hasta que los tomates se empiecen a romper. Vierte la 1/2 taza del líquido que reservaste, el cerdo, la manzana, el melocotón, la pera, el plátano, las pasas y las almendras en la salsa. Sigue cocinando la salsa, revolviéndola con frecuencia, durante 10 minutos o hasta que las frutas estén tiernas. Calienta el horno a 350 grados. Rocía un molde de horno de vidrio de 13 x 9 pulgadas (3 cuartos) con spray para cocinar. Con cuidado para no romperlos, quítales las semillas y los tallos a los chiles. Coloca cerca de 1/2 taza del relleno de cerdo en cada chile. Acomoda los chiles en una sola capa en el molde de horno y cúbrelos con papel aluminio. Hornéalos entre 20 y 30 minutos o hasta que compruebes con un tenedor que los chiles estén tiernos y el relleno, bien caliente. Pon una cantidad generosa de salsa sobre cada chile y esparce las semillas de granada antes de servir.